¿Se acuerdan de Sam Lufti?
Hace unos años fue manager de Britney Spears y la condujo
directo a la rehabilitación psiquiátrica. Ahora el
controversial ex representante ha demandado a la cantante
por difamación y para este proceso judicial solicitó
una evaluación psicológica de la estrella del pop la cual
fue negada por el juez encargado de procesar el caso.
Lufti también pidió acceso a pruebas toxicológicas a las
que se sometió Spears en el 2008 para usarlas como parte
de su defensa en la demanda y estas también le fueron
negadas. Los abogados de la cantante de Toxic mantienen
que Spears todavía no es competente del todo como para
someterse a las evaluaciones que los del equipo legal de
Lufti solicitaron a la corte. El padre de Britney también
ha sido demandado por un supuesto caso de agresión en 2008
pero hasta enero del año viene no se llevará a cabo
el juicio sobre este incidente.
Sin estos exámenes y evidencias la demanda de Lufti se
complica cada vez más, mientras tanto el equipo de Spears
ha conseguido una orden de alejamiento permanente que
prohíbe a su ex manager acercarse a más de 100 pies
de distancia de la ahora rehabilitada cantante.
Britney ahora no tiene mucho tiempo para pruebas porque
justo hoy comienza su esperada gira mundial Femme Fatale
en la ciudad de Sacramento en California, lo que nos
preocupa es que tan “competente” estará para dar tantos conciertos.
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